Con viñedos sanos y con algunas semanas de adelanto, Viña Ventisquero ya comenzó a cosechar las primeras uvas en el valle de Atacama, en Huasco. A mediados de febrero continuaría en Colchagua, y en marzo, en la zona costera del centro y centro sur del país.
La temporada ha estado marcada por las altas temperaturas máximas y mínimas en el valle central, por lo que se espera un inicio dos semanas más temprano de lo habitual en la cosecha de algunos cuarteles. Esta situación se ha presentado en el interior del valle central, no así en zonas más costeras, cordilleranas o del sur.
A pesar de las altas temperaturas, desde la viña señalan que el manejo de los viñedos en follaje abierto ha permitido proteger completamente los racimos del sol directo, y así evitar la deshidratación de bayas de Cabernet y Merlot. Se proyecta también una producción equilibrada de racimos en Carmenere y Syrah, lo que se traduce en vinos más concentrados.
“El criterio de riego en los campos, basado en la medición directa del stress hídrico de las plantas, ha generado un excelente efecto de profundizar las raíces, ahorrar un 50% del agua usada con respecto al promedio de la zona central y enfrentar de mejor manera el cambio climático”, afirma Sergio Hormazábal, enólogo de Viña Ventisquero.
Vendimia en el desierto
La cosecha en Huasco, Atacama, comenzará con Chardonnay , con uvas sanas, equilibradas, manteniendo la salinidad y mineralidad propias del desierto. En Viña Ventisquero proyectan una buena vendimia, de producción similar a 2016, y con uvas que representen cada cuartel y cepa en su identidad.
“Nuestros viñedos del norte, en pleno desierto de Atacama, muestran la dispersión geográfica de la Viña y buscan entregar un amplia variedad de vinos jugados y que reflejan este terroir extremo de Chile”, señala Sergio Hormazábal.
Sobre los incendios
En cuanto a los graves incendios que se están desarrollando en varias regiones del país, Sergio Hormazábal aclara que Viña Ventisquero no se ha visto afectada. “Afortunadamente nuestros viñedos están fuera de peligro, pero estamos atentos y consternados por la situación que están viviendo diversas viñas. Sin duda que los catastróficos incendios van a marcar en alguna medida esta vendimia, ya sea por su aporte en el alza de las temperaturas y el efecto invernadero, por haber arrasado con varias decenas de hectáreas de viñedos y por el efecto que pueda tener el humo en los vinos producidos en las zonas afectadas”, afirma Sergio Hormazabal.
El equipo de Viña Ventisquero está activamente colaborando para ayudar a las comunidades y apoyar a las zonas afectadas especialmente en el Valle de Colchagua.
