Durante los últimos días, la comuna puerto de Talcahuano, en Biobío, se ha visto afectada producto del olor emanado de la intensa actividad pesquera en la zona, lo cual ha sido ampliamente difundido por los medios locales. Ante ello, existe preocupación en el sector pesquero dedicado a la extracción de sardina y anchoveta, y por ello la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca), a través de su dirección zonal Ñuble-Biobío, se encuentra generando estrategias e instancias de participación público- privadas para abordar esta problemática desde el ordenamiento y las buenas prácticas pesqueras.

“Es importante recalcar que a la fecha contamos con una operación pesquera igual o menor a años anteriores. La actual problemática que hemos detectado corresponde a una menor capacidad de proceso de los volúmenes de sardina y anchoveta provenientes de la pesca artesanal hacia las plantas de proceso”, explicó la directora zonal de Pesca y Acuicultura, Lilian Troncoso.

En este contexto, y a requerimiento transversal de todos los sectores, la dirección zonal, junto a Sernapesca y Seremi Economía, se reunió esta semana con Asipes, Lota Protein, Alimar, Orizon, Camanchaca; y representantes de organizaciones artesanales de Talcahuano, San Vicente, Coliumo, Coronel y Lota.

Lo anterior, con el fin de avanzar- en un marco de colaboración y asociatividad- en medidas concretas que permitan ordenar de mejor manera el abastecimiento, desde la pesca artesanal hacia las distintas plantas de proceso de la zona.

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Reforzamiento de la medida de una entrega al día 

En específico en la reunión, las empresas Orizon y Lota Protein señalaron haber acordado con sus armadores para la operación de esta semana, lo mismo habría hecho Bahía Coronel según los dirigentes que le entregan pesca a esa empresa. De esa forma, se acordó que todas las plantas se reunirían con sus asociados y reforzarían la medida de una entrega productos al día.

“Los pescadores artesanales ofrecieron apoyo para difundir esta medida entre sus pares y promover su cumplimiento. De igual forma, como dirección zonal, ofrecimos nuestra colaboración y buenos oficios para reunirnos con la industria y sus asociados, si no pudieran convencerlos de cumplir esta medida, para mediar en el proceso; lo mismo para los artesanales”, detalló la directora zonal de Pesca y Acuicultura, Lilian Troncoso.

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Entre los acuerdos también se destaca que Sernapesca optimizará la certificación. A su vez, también, entre los participantes, se acordó continuar con el desarrollo de reuniones, de todos los involucrados, previo a la apertura de la temporada y a inicios del 2024 para acordar el ordenamiento futuro y otras materias relevantes, “donde se vele por un procesamiento de pesca lo más fresca posible, y por la salud y bienestar de los trabajadores tanto de la industria como de los pescadores artesanales, quienes a veces han tenido que esperar largas horas embarcados”, precisó Troncoso.

Al respecto el Seremi de Economía, Fomento y Turismo del Biobío sostuvo que:

“Lo primero a mencionar es que tanto la pesca artesanal como la pesca industrial tienen absoluto compromiso por el cuidado del medio ambiente y están completamente abiertos y con voluntades amplias para mejorar sus procesos de operación y de extracción de estos recursos y del proceso”

A partir de eso, en la instancia celebrada durante el martes pasado se establecieron importantes acuerdos para que la industria de la Región del Biobío tenga operación regulada, que las artes que hace la pesca artesanal sean controlados y que, por lo tanto, la extracción de este recurso se ajuste completamente a la capacidad de procesamiento que tiene la industria y así evitar la saturación de las fábricas y por lo tanto así evitar también los episodios de malos olores.

“Acotar también que la pesca artesanal del Biobío ya lleva 20 años operando con un sistema de asignación de cuotas para cada embarcación y por lo tanto la carrera olímpica no existe en la Región del Biobío.”

En esta línea, el Seremi hizo un fuerte llamado a eliminar la sensación que hoy existe de que la pesca artesanal sale a hacer una carrera olímpica, a pescar la mayor cantidad de recursos que pueda pescar.

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“No es así. Hace 20 años se utiliza el sistema de asignación de cuotas. Ha sido un sistema exitoso que ha permitido cuidar el recurso y justamente dado eso, hoy día tenemos una abundancia de recursos”.

Este sistema de asignación de cuotas ha permitido que durante los últimos 20 años se cuide el recurso sardina y anchoveta que le permita su reproducción y sus procesos biológicos naturales y por lo tanto, hoy día la Región del Biobío tiene abundancia de pesca a pocos minutos de la costa y eso hay que celebrarlo porque genera empleo, genera actividad económica, genera circulación, genera riqueza y exportaciones para la Región del Biobío.

Hoy día tanto la pesca artesanal como la pesca industrial están celebrando esta abundancia que no se ve con regularidad anualmente y por lo tanto están los compromisos asumidos para que se siga cuidando este recurso. Pero al mismo tiempo que la extracción no genere efectos o impactos medioambientales sobre su comunidad.

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